Con la llegada de las células fotoeléctricas y la creación de los fotómetros en la década de los años 30, Fred Archer y Ansel Adams formularon un método para calcular la exposición.
El sistema de zonas ayuda al fotógrafo a controlar el contraste y el tono en la fotografía en blanco y negro fotoquímica. Es una forma de trasladar lo que ve el fotógrafo a su copia final, en papel, de la manera más fiel posible. Para poder realizar este método es necesario un buen control de la exposición y de el revelado.
El fotómetro mide la intensidad de luz real de la escena que incide en el sujeto independientemente del motivo o persona que estemos fotografiando y nos ofrece unos valores de exposición en consecuencia, traduciéndolos a valores estándar en fotografía. Para ello mediremos con este fotómetro, (exposición) que nos dará el tiempo necesario para que nuestra superficie fotosensible (negativo) reaccione hasta formar una imagen correctamente.
El fotómetro siempre calcula la exposición en base a tres factores, (triángulo de exposición) dos de ellos tendrán que ser elegidos siempre:
- Sensibilidad (ISO).
- Apertura , diafragma.
- Tiempo de obturación / velocidad de obturación.
*Esta exposición que nos indique será siempre un tono gris medio 18%.
TIPOS DE MEDICIÓN
Los fotómetros pueden medir la luz de 2 maneras diferentes:
- Incidente. (Luz que recibe el objeto a fotografiar)
- Reflejada. (Luz que refleja el objeto a fotografiar)
Los fotómetros de mano suelen estar diseñados para poder ser usados de las dos maneras. Para medir la luz incidente llevan un accesorio plástico translúcido que cubre la fotocélula (luminosfera).
En cambio los fotómetros que usan las cámaras de fotografía solo pueden medir la luz reflejada.
Para medir la luz incidente de un objeto, situaremos el fotómetro apuntando la luminoesfera hacia donde esté situada nuestra cámara. Este método de medición no tiene en cuenta el tono de nuestro motivo y como veremos mas adelante, es necesario la medición reflejada para el sistema de zonas.
Para medir la luz reflejada colocaremos nuestro fotómetro desde la posición de la cámara apuntando a nuestro motivo. (Medición entre 50º y 1º). Estos fotómetros están calibrados para medir sobre superficies de un tono gris medio (superficie que refleja un 18% de la luz que recibe).
La medición de luz reflejada nos indicará la luminancia de nuestro motivo/superficie. Esta medición es mucho mas exacta para un correcta exposición ya que la luz reflejada, es la cantidad de luz incidente menos la cantidad de luz absorbida.
Para obtener una correcta exposición, deberemos de sobreexponer o subexponer en nuestra cámara dependiendo del motivo a fotografiar. Para conocer la variación exacta que deberemos de colocar en nuestra cámara, usaremos el sistema de zonas, en el que nos adentraremos en la próxima entrada.
CONCLUSIÓN
Para comprender el sistema de zonas es necesario que entendamos el comportamiento y la forma de trabajar de los fotómetros, ya que serán estos los que nos darán la información necesaria para trasladar nuestra escena a fotografiar a una escala de grises.
*Esta es la primera parte de una serie de artículos para comprender el sistema de zonas. Aunque parezca que no tiene mucho sentido, en las siguientes entradas todo irá tomando forma.